Spohr (Lufthansa): “Hay que poner cuotas al crecimiento aéreo”

Se ha de aplicar un límite máximo al transporte aéreo, porque ha crecido demasiado en los últimos años y esto no se puede mantener. Quien hace este llamamiento no es un ecologista loco, ni un radical incendiario, ni alguien que no sabe del sector, ni un irresponsable que desprecia la empresa.

Es Carsten Spohr, el director general del grupo Lufthansa. “La inversión y la modernización de la infraestructura no pueden mantener este ritmo. El mercado va a crecer más lentamente en los próximos años y la capacidad de las infraestructuras va a llegar a su límite”. Por lo que habrá más retrasos por saturación del control aéreo.

Spohr maneja la idea de aplicar una moratoria al crecimiento, dado el colapso. “No necesitamos un crecimiento ciergo, a cualquier precio, sino con calidad. Esto significa que la infraestructura ha de estar de acuerdo con la demanda. Si no es posible, hay que hablar de poner un tope en el crecimiento, por ejemplo, un número máximo de vuelos en un determinado espacio aéreo.” Spohr dice que puede haber un crecimiento de vuelos este verano en Alemania del 2,3 por ciento, mientras el control aéreo va a reducir su capacidad.. Es urgente actuar”.

No es frecuente que uno de los hombres más poderosos de la aviación mundial explique en profundidad y detalle cómo está el sector y cómo lo ve. Esto es lo que Carsten Spohr, el director general del grupo Lufthansa hizo para el magazine World Routes, del grupo TTG Media.

El dato que resume qué ocurre hoy en Lufthansa es que, por primera vez en su historia se va a reemplazar un avión por uno más pequeño; el 747-400 será reemplazado por el 777-9. “Yo tengo 25 años de experiencia y le puedo asegurar que, mirando Estados Unidos, estamos al inicio de un proceso de fuerte consolidación”. Spohr está convencido de que Lufthansa será una de las aerolíneas supervivientes. Según él, quedarán tres aerolíneas chinas, tres entre el Golfo Pérsico y Turquía, tres en Estados Unidos y el grupo Lufthansa en Europa, aunque no nos dice cuántas otras aerolíneas sobrevivirán.

Obviamente, Lufthansa no cuenta qué planes tiene. Admite que se actúa cuando surge la oportunidad. Ahí está la oportunidad de Thomas Cook y la de Alitalia, aunque de esta segunda dice que “no estamos preparando nada en este momento”, aunque Italia es el primer mercado exterior de Lufthansa.

Spohr sí que admite que el grupo quiere crecer en viajes turísticos. Para quienes hayan visto las pérdidas descomunales que acumuló la filial low-cost de Lufthansa, Eurowings, Spohr antes debería explicar cómo salvar a esta compañía, sin embargo, su plan es crecer en el segmento turismo (atención Mallorca), para lo cual espera quedarse con partes de Thomas Cook (Condor en Alemania).

De Eurowings dice que aún tardará tres años en dejar de perder dinero. Spohr dice que Eurowings será una low-cost, pero no bajará sus precios por debajo de 30 eruos. “Menos es una locura ambiental y económica”.

Pese a todo lo que dice Spohr en cuanto al crecimiento de la demanda, Lufthansa confirma que se desprende de los aviones grandes, devolviendo a Airbus seis A380. Pero matiza que en parte su política de aviones tiene que ver con los retrasos en Frankfurt, su principal hub.

Lufthansa reconoce que su compañía aérea modélica es Edelweiss, “que está operando maravillosamente, con un 15 por ciento de sus vuelos en el segmento del ocio”.

Lufthansa nota el golpe de Ryanair con la impresionante expansión de Lauda en Viena. Austrian Airlines tuvo en 2018 una caida del 55 por ciento de su Ebitda porque Lauda lanzó 21 nuevas rutas.

¿Brexit? Ninguna importancia económica y añade que “simplemente es triste”. Sólo el 5 por ciento de su negocio viene del mercado británico por lo que “el riesgo es muy limitado.

J. Calonge. Se ha de aplicar un límite máximo al transporte aéreo, porque ha crecido demasiado en los últimos años y esto no se puede mantener. Quien hace este llamamiento no es un ecologista loco, ni un radical incendiario, ni alguien que no sabe del sector, ni un irresponsable que desprecia la empresa. Es Carsten Spohr, el director general del grupo Lufthansa. “La inversión y la modernización de la infraestructura no pueden mantener este ritmo. El mercado va a crecer más lentamente en los próximos años y la capacidad de las infraestructuras va a llegar a su límite”. Por lo que habrá más retrasos por saturación del control aéreo. Spohr maneja la idea de aplicar una moratoria al crecimiento, dado el colapso. “No necesitamos un crecimiento ciergo, a cualquier precio, sino con calidad. Esto significa que la infraestructura ha de estar de acuerdo con la demanda. Si no es posible, hay que hablar de poner un tope en el crecimiento, por ejemplo, un número máximo de vuelos en un determinado espacio aéreo.” Spohr dice que puede haber un crecimiento de vuelos este verano en Alemania del 2,3 por ciento, mientras el control aéreo va a reducir su capacidad.. Es urgente actuar”.

No es frecuente que uno de los hombres más poderosos de la aviación mundial explique en profundidad y detalle cómo está el sector y cómo lo ve. Esto es lo que Carsten Spohr, el director general del grupo Lufthansa hizo para el magazine World Routes, del grupo TTG Media.

El dato que resume qué ocurre hoy en Lufthansa es que, por primera vez en su historia se va a reemplazar un avión por uno más pequeño; el 747-400 será reemplazado por el 777-9. “Yo tengo 25 años de experiencia y le puedo asegurar que, mirando Estados Unidos, estamos al inicio de un proceso de fuerte consolidación”. Spohr está convencido de que Lufthansa será una de las aerolíneas supervivientes. Según él, quedarán tres aerolíneas chinas, tres entre el Golfo Pérsico y Turquía, tres en Estados Unidos y el grupo Lufthansa en Europa, aunque no nos dice cuántas otras aerolíneas sobrevivirán.

Obviamente, Lufthansa no cuenta qué planes tiene. Admite que se actúa cuando surge la oportunidad. Ahí está la oportunidad de Thomas Cook y la de Alitalia, aunque de esta segunda dice que “no estamos preparando nada en este momento”, aunque Italia es el primer mercado exterior de Lufthansa.

Spohr sí que admite que el grupo quiere crecer en viajes turísticos. Para quienes hayan visto las pérdidas descomunales que acumuló la filial low-cost de Lufthansa, Eurowings, Spohr antes debería explicar cómo salvar a esta compañía, sin embargo, su plan es crecer en el segmento turismo (atención Mallorca), para lo cual espera quedarse con partes de Thomas Cook (Condor en Alemania).

De Eurowings dice que aún tardará tres años en dejar de perder dinero. Spohr dice que Eurowings será una low-cost, pero no bajará sus precios por debajo de 30 eruos. “Menos es una locura ambiental y económica”.

Pese a todo lo que dice Spohr en cuanto al crecimiento de la demanda, Lufthansa confirma que se desprende de los aviones grandes, devolviendo a Airbus seis A380 (Treinta años después, Lufthansa empieza la retirada de los A320). Pero matiza que en parte su política de aviones tiene que ver con los retrasos en Frankfurt, su principal hub.

Lufthansa reconoce que su compañía aérea modélica es Edelweiss, “que está operando maravillosamente, con un 15 por ciento de sus vuelos en el segmento del ocio”.

Lufthansa nota el golpe de Ryanair con la impresionante expansión de Lauda en Viena. Austrian Airlines tuvo en 2018 una caida del 55 por ciento de su Ebitda porque Lauda lanzó 21 nuevas rutas.

¿Brexit? Ninguna importancia económica y añade que “simplemente es triste”. Sólo el 5 por ciento de su negocio viene del mercado británico por lo que “el riesgo es muy limitado.