Venta de Air Europa: falta de sintonía entre los Hidalgo

La falta de sintonía entre los Hidalgo acerca de las negociaciones de la venta de Air Europa, por un lado, y de la marcha sinuosa de Halcón con Ávoris, por otro, fue adelantada por preferente.com hace dos meses cuando publicamos—lo hizo otro compañero— que el padre había cogido el último vuelo de la compañía desde Santo Domingo para ponerse al frente de la venta de activos del grupo, tras pasar una larga temporada confinado en Cabeza de Toro (Punta Cana) (Hidalgo regresa de Dominicana para “agilizar” la venta de Air Europa).

Escrito está que él, Juan José Hidalgo Acera, “una fuerza de la naturaleza”, quería llevar personalmente las conversaciones con el Gobierno y con gente de altísimo poder. Aunque le costara sangre, sudor y lágrimas el presidente de Globalia no podía ser un actor pasivo en una situación tan al borde del colapso como la que vive su grupo y otros tantos.

Y a fuer que lo ha hecho, con su estilo personalizado — “estamos secos y como no nos ayuden nuestro grupo dura dos telediarios ", una frase dicha en la macro cumbre de la CEOE y que impactó a nivel nacional— y con sus métodos tradicionales de tocar en las puertas adecuadas y con los métodos que en otras situaciones de crisis le sirvieron para solventar sus problemas.

Ese retorno inesperado del patriarca, harto de que desde el Gobierno no se le pusieran al teléfono cada vez que llamaba desde los campos de golf de los Rainieri y de los Hazoury, le ofuscó tanto que decidió coger el petate y tomar las riendas del portaviones que él creó de la nada y que ahora comanda su hijo Javier , “un tío más preparado que yo”, según manifestaba semanas antes del confinamiento.

Lo que nadie imaginaba, ni su entorno más próximo, desde el letrado que comanda el gran bufete de abogados al por mayor al más famoso periodista deportivo de todos los tiempos, es que padre e hijo terminarían discrepando, a la greña, en un escenario en el que el resto de patriarcas, por su dramatismo, van de la mano con sus herederos.

Hidalgo padre quiere el rescate de Air Europa antes de que zozobre aún más, antes de que el tsunami se lleve por delante todo el grupo. Un rescate que era el "plan C" al que una servidora aludió semanas atrás y que es muy complicado porque es dinero público, como decía este jueves John Muller en El Mundo y el domingo María Jesús Pérez en ABC, en dos magníficos artículos.

Un plan C en el que, como reflejamos, interceden prebostes que no hacen asco a nada con tal de arañar algo. Pero no están las cosas ahora como para jugarse el tipo con la que está cayendo en el gobierno central con Podemos y Zarzuela. Y con el asunto del caso Delcy aún pendiente, un escollo para los intermediarios.