El Plan de Reforma Integral (PRI) de la Playa de Palma tiene vía libre definitivamente para aprobarse este mismo año, tras haber obtenido la aprobación de Aviación Civil, Aena y la Aesa (Agencia Estatal de Seguridad Aérea), que era preceptiva al estar la zona cerca del aeropuerto de Son Sant Joan.
Con ello, se eliminan las trabas para los hoteles – todos de categoría cuatro estrellas o superior -- que tienen obras previstas para aumentar en altura o construirse desde cero. En conjunto, se trata de actuaciones que supondrán una inversión conjunta de unos 170 millones de euros.
Álvaro Gijón, teniente de alcalde de Turismo del Ayuntamiento de Palma y gerente del Consorcio de este destino maduro, ha señalado que el próximo invierno será el que registre el mayor montante inversor en la zona, al tocar “proyectos emblemáticos”. En los tres últimos años se han renovado 26 de los 140 hoteles de la zona, pero la temporada baja que viene verá transformarse a establecimientos como el Riu Bravo, el Mac Negresco, el Iberostar Royal Cristina y el Mac Garonda.
Además, el empresario Guillermo Alomar (Inversiones Llaüt) levantará un hotel de cinco estrellas, el Playa Palma Vista, en el mismo solar en el que la cadena Hipotels va a construir un cuatro estrellas superior, que se llamará Hotel Saïd, y más adelante prevé también crear otro cinco estrellas. Igualmente, comenzarán las obras de otros dos proyectos nuevos, uno de ellos de Pabisa y otro del empresario Domingo Muñoz (dueño del hotel Sunprime Palma Beach Resort & Spa, antes Brasilia), que estarán acabados a finales de 2016.
Las construcciones de nueva planta representarán unos 125 millones de euros de inversión. La cifra rondará los 170 millones si se le suma lo que van a gastarse los cuatro hoteles antes mencionados, que se reformarán y aumentarán de categoría para entrar en la de cuatro estrellas superior.
El 18 de agosto se celebrará una reunión de la Junta Rectora del Consorcio tras la cual el Consell Insular de Mallorca dispondrá hasta finales de octubre para emitir sus informes y, de esta manera, permitir que el PRI quede totalmente aprobado dentro de este año. “Ningún proyecto hotelero quedará paralizado o retrasado por el PRI”, ha subrayado Gijón quien, en otro orden de cosas, ha remarcado el positivo efecto que la ordenanza cívica de la capital balear ha tenido sobre la reducción de la prostitución y el trile en la Playa de Palma. Pendiente queda aún el control de la venta ambulante y los masajistas no autorizados, ha reconocido.
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