Airbnb, plataforma de economía colaborativa, generó en el año 2015 un impacto de 740 millones de euros en la ciudad de Barcelona y multiplica con creces el impacto que produjo en la ciudad condal en el año 2013, que fue de unos 128 millones de euros.
Según han explicado este miércoles el director general de marketing Services España, Arnaldo Muñoz, y el director global de asunto públicos de la compañía, Chris Lehane, de los 740 millones de impacto económico generados, 500 de ellos fueron gracias al consumo en comercios y servicios que los turistas alojados en alguno de sus establecimientos realizaron, mientras que los 240 millones restantes corresponden al pago de tarifas al anfitrión.
Tanto Muñoz como Lehane, han aprovechado la presentación de los datos para pedir a la Generalitat que se regule este tipo de actividad colaborativa para que Barcelona pueda ponerse al nivel de ciudades como Londres o París, que ya recaudan la tasa turística. La capital catalana cuenta con 16.000 anunciantes y es la cuarta ciudad para Airbnb, solo superada por estas dos ciudades europeas y Nueva York.
Cabe señalar que hace unos días, la Comisión Nacional de los Mercados y Competencia (CNMC) abrió una consulta pública sobre estos tipos de modelos de economía colaborativa (Competencia sugiere desregular los apartamentos turísticos) exponiendo una serie de propuestas para poder regular este tipo de plataformas.
Estos datos han salido el mismo día que el Ayuntamiento de la ciudad ha decidido prorrogar un año la moratoria turística, que impide abrir nuevos alojamientos turísticos, y que fue interpuesta por la alcaldesa de la ciudad, Ada Colau. Con la suspensión de las licencias de hoteles en la ciudad condal, se han paralizado 38 proyectos de alojamiento –hoteles, albergues, residencias- y ha frenado la inversión de 3.000 millones de euros (La suspensión de licencias de hoteles en Barcelona ha paralizado 38 proyectos).
Que tal si Colau investigaria ahora si han cobrado impuestos de esto de 240 millones ...