El empresario Ferrera dice que la “dejadez” del Ejecutivo canario resta competitividad

El empresario Ángel Ferrera, presidente de Toyota Canarias, ha denunciado la dejación, por parte del Gobierno de Canarias respecto a la renovación hotelera del Archipiélago y la pérdida de competitividad en favor de otros destinos del Mediterráneo como la Riviera Turca y también le ha acusado de lentitud para adaptarse a los cambios de la demanda.  Ferrera, presidente también del Centro Atlántico de Pensamiento Estratégico (CATPE), se hace eco de un amplio informe elaborado por el propio centro que preside.

En una entrevista publicada en el blog de la Confederación de Empresarios de Canarias (CCE), Ferrera ha dicho que las islas han sufrido "la pérdida de competitividad turística derivada del envejecimiento de los alojamientos, las infraestructuras y los conceptos vacacionales". "Y por si esto fuera poco", ha dicho, "hay que sumarle factores externos que han evolucionado en sentido contrario, como la entrada de miles de nuevas plazas en el mercado turístico, principalmente por nuestros competidores del Mediterráneo".

En este sentido el presidente de Toyota ha indicado que "las administraciones han intervenido en los mecanismos de autorregulación del mercado a través de moratorias, que han producido los efectos contrarios a los pretendidos y han insistido en mantener una maraña burocrática".

Ferrera ha dicho que no se puede basar toda la estrategia turística en la rehabilitación de la planta existente, ya que el mercado internacional se moderniza con productos nuevos. Por otra parte, la rehabilitación tampoco crea puestos de trabajo.

Asimismo, Ferrera ha destacado que es un error "basar toda la estrategia turística solamente en la rehabilitación de la planta existente, sobre todo porque el mercado internacional se moderniza con productos nuevos". Y ha apuntado que tampoco es una solución para recuperar puestos de trabajo, "pues las rehabilitaciones apenas crean empleo".

Finalmente, en otro aspecto, el empresario ha insistido en que el camino está en “corregir cuestiones que han quedado muy desfasadas como los porcentajes de las compensaciones al transporte de viajeros y mercancías" o el tratamiento “totalmente anacrónico” que se le da a las telecomunicaciones.