La Junta de Andalucía, la patronal CEA y los sindicatos CCOO-A y UGT-A han presentado un plan para reducir la estacionalidad del destino. Entre otros objetivos, pretende bajar un 30% el número de camas hoteleras cerradas de aquí a 2020, a razón de un 5% de reducción anual.
Un informe de la Junta cifra en 84.000 las plazas cerradas a 1 de marzo, lo que supone el 48% del total de Andalucía y el 54% de las del litoral andaluz. En Almería la planta cerrada ha llegado al 76%, mientras que en Málaga ha rondado el 49% y en Granada del 26%.
El consejero de Turismo, Rafael Rodríguez, ha manifestado que la región no se puede permitir este nivel de inactividad en temporada baja “porque afecta a la competitividad, a la explotación de la infraestructura hotelera y a la capacidad de generar riqueza y empleo”.
Rodríguez ha reconocido la dificultad del “reto” de aumentar la proporción de oferta hotelera abierta en otoño-invierno, pero ha considerado que se trata de un horizonte “razonable”. Para lograrlo, Andalucía realizará un esfuerzo promocional en temporada media y baja, centrándose en los mercados nórdicos durante noviembre, enero y febrero; en el mercado francés en abril y mayo y en el Reino Unido y Alemania en diciembre y enero.
Además, el plan para la gestión de la estacionalidad prevé impulsar las estancias cortas en segmentos como el de cruceros, cultural, golf, naturaleza o idiomas, así como atraer a más turismo senior y joven.
Para los empresarios del alojamiento, la Junta apuesta por bonificar el IAE (Impuesto de Actividades Económicas) o el IBI (Impuesto de Bienes Inmuebles), como ocurre ya en Marbella o Almería. También se plantea ofrecer ayudas públicas para asistir a ferias turísticas o acciones promocionales.
Por su parte, el presidente de la Mesa del Turismo de la patronal CEA (Confederación de Empresarios de Andalucía), Miguel Sánchez, ha pedido que haya más subvención para las vacaciones del Imserso, a fin de que el hotelero se vea beneficiado y el usuario siga pagando lo mismo.
Seguimos con la misma cantinela de las temporadas bajas
Antes de gastar en promociones, pidan opinión a sus hoteleros de cada zona y vean la posibilidad de subvencionar precios atractivos que no perjudiquen tanto al prestatario