El Gobierno de Baleares va a usar la mayor parte de lo que se recaude por el impuesto del turismo sostenible para pagar obras que garanticen el abastecimiento de agua en el archipiélago. Unos 30 millones de euros de la ecotasa irán a este fin, según la prseidneta Francina Armengol.
Diario de Mallorca explica que la medida, propuesta semanas atrás por el PP, ha tenido el respaldo unánime de todas las fuerzas políticas del Parlamento autonómico. Armengol ha justificado el destino de la recaudación del impuesto turístico a estos fines por el retraso en los pagos del Ministerio de Hacienda, que aún no ha cerrado el objetivo de déficit de 2016.
Tras la sequía padecida por numerosas localidades este verano, especialmente en la Sierra de Tramuntana mallorquina, el Ejecutivo balear ha decidido invertir en la red hidráulica mejorando las canalizaciones y las depuradoras.
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