El presidente canario, Paulino Rivero, aprovechó su visita ayer a la ITB de Berlín para reclamar una vez más al Gobierno español la bonificación de las tasas aeroportuarias en el archipiélago con el objetivo de favorecer la llegada de visitantes a las islas.
“Es muy importante seguir reivindicando la necesidad de abaratar los costes de operación en los aeropuertos canarios y que se pueda recuperar este mecanismo que resultó fundamental para que en 2011 se batieran todos los registros en la llegada de visitantes”, señaló Rivero.
Sin embargo el ministro de Turismo, José Manuel Soria, que también visitó ayer la ITB descartó una rebaja de las tasas alegando el fuerte proceso de ajuste fiscal en que está inmerso el Estado. Además recordó que “el nivel de tasas aeroportuarias” en España está “por debajo de ciudades europeas equivalentes”.
Respecto a las previsiones para este verano del mercado alemán, el presidente canario reconoció que descenderá el número de turistas germanos y por ello apostó, entre otras cosas, por mejorar la conectividad, “el número de frecuencias que se desarrollan entre Alemania y Canarias”.
Rivero recordó la importancia del turismo alemán para Canarias pues se trata de “nuestro segundo cliente y uno de los primeros en cuanto a gasto” y por ello destacó que reforzar lo que significa la oferta de Canarias en Alemania en esta feria es importante”.
En paralelo, la a Federación Canaria de Municipios (Fecam) ha propuesto el canon de un euro al día para los alojados en hoteles y 50 céntimos para los que utilizan apartamentos, para financiar a los municipios turísticos, una medida que es similar a la que se aplica en Cataluña.
Rivero, de su lado, ha afirmado este jueves que el operador turístico TUI comparte la necesidad de abaratar el coste de los aeropuertos de las islas, de bonificar las tasas aeroportuarias y de diversificar los mercados.
Que se lo paguen ellos que vuelan con sus cias áreas y no españolas.
Dinero para hospitales y no para que los alemanes vengan aquí a operarse y a comprar casas de parados españoles en quiebra.
Que se rasquen el bolsillo.