Francisco Verdú, quien fuera máximo ejecutivo de Caja Madrid con Rodrigo Rato de presidente de esta entidad financiera, nunca hizo un uso indebido de las tarjetas privadas que tanto consejeros como directivos utilizaron a nivel personal y que tanto revuelo ha originado en todo el país por falta de rigor y ética de todos ellos.
Verdú, tal como publicó el pasado jueves preferente.com, es de los pocos directivos que jamás usaron dicha tarjeta para beneficio propio: ni para comprar ropa, ni para pagar hoteles, ni para retirar dinero en efectivo. El director de El Mundo resaltaba este hecho este domingo en su artículo semanal: “la guardó en un cajón (sic)”.
García Abadillo se muestra rotundo al afirmar que todos sabían lo que hacían cuando utilizaban la tarjeta “black”. “Alegar desconocimiento es una falta de respeto a la inteligencia (…) La prueba es que Francisco Verdú, consejero delegado, nunca la utilizó”. Verdú y otros tres directivos más, todo sea dicho.
En la actualidad, Francisco Verdú es asesor de ACS en Miami. Antes de ejercer como consejero delegado de Caja Madrid fue el máximo ejecutivo de Banca March y consejero del grupo de las empresas que preside Florentino Pérez. Estuvo, asimismo, muy implicado en el sector turístico, al que apoyó en importantes operaciones.
Ya antes de acceder al cargo de consejero delegado de Banca March, Verdú ocupó un puesto en el seno del consejo de administración de Air Europa en representación del Banco de Vizcaya, entidad que fue accionista de la compañía al poco de constituirse, cuando la creó el grupo británico de Harry Goodman, ILG.
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