Exceltur supura por dónde más le duele: la marcha de sus dos impulsores, Barceló y Meliá. Este lobby afronta un futuro incierto por el goteo constante de asociados que se están dando de baja. De los grandes grupos vacacionales sólo permanece Iberostar.
El nuevo presidente, el dinámico Amancio López, tiene ante sí un alto reto: hacer viable un grupo de presión en el que cada vez menos creen sus miembros. La salida de Barceló y Meliá, los dos creadores hace 10 años, puede ser la puntilla de la pomposa alianza.
Simón Pedro Barceló y Sebastián Escarrer pusieron toda la carne en el asador en la puesta en marcha de un lobby nacido para defender los intereses del sector turístico. Pero a la hora de la verdad Exceltur no ha dado la talla en los grandes asuntos.
De entrada, vino al mundo con la rémora de estar catapultado por el propio Gobierno—Juan Costa y Rodrigo Rato—y, sobre todo, porque no acertaron con el timonel del proyecto, un vicepresidente ejecutivo polémico y más pirómano que apagafuegos.
A rebufo de los grandes grupos, empresas diversas del Sector se dieron de alta en esta alianza de empresas turísticas. Entre ellas, cabe destacar tres empresas canarias que ahora estarían planteándose darse de baja: Hospiten, Loro Parque y Bahía del Duque.
A excepción de Iberostar—años lleva deshojando su salida—solo quedan de los grupos poderosos Iberia y NH. O sea, dos grupos con el agua al cuello. El panorama no es precisamente halagueño para Exceltur. ¿Qué hará el presidente Amancio López?
La última cumbre de Exceltur ha sido una reunión con los alcaldes de las principales capitales turísticas. Este tipo de encuentros con las autoridades políticas ha sido el denominador común del lobby desde su creación. Y sus costosísimos informes.
Salvo foros de debate de alto nivel, logros y éxitos en su lucha por el Sector se conocen muy pocos. Muy escaso bagaje para una alianza cuyo presupuesto se diluye básicamente en el sueldo de su empleado estrella y en los gastos de sus estudios.
Es más eficaz la patronal que preside Molas y gerencia Estalella que este lobby cuyo responsable del día a día es más proclive al conflicto que al entendimiento. Muletas de amianto para López: la cojera de Exceltur ya es crónica.
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