Málaga tiene ayuntamiento del Partido Popular, en una autonomía gobernada por el Partido Popular. Aunque este partido dice estar en contra del aumento de los impuestos, acaba de abrir el debate sobre la creación de una tasa turística en Málaga, con el rechazo frontal –en este caso, abiertamente frontal– de los hoteleros.
El foro del Turismo que se hará este mes de enero debatirá la tasa que, como se dice siempre, será pequeña, para después ir subiendo paulatinamente, aunque esto último no se anuncia.
Los hoteleros se oponen radicalmente, aduciendo que pagan más impuestos que cualquier otro sector. Sin embargo, en Málaga el turismo va tan bien desde hace años, el ayuntamiento ha hecho tantas inversiones turísticas, que probablemente no sea un impuesto impopular.
En el ayuntamiento no hay una postura abierta. O sí, pero se presenta como un debate abierto. Dicen que Málaga corre el riesgo de la saturación turística y que por eso hay que abrir el debate.
Málaga desarrolló estas Navidades una iluminación especial que ha provocado atascos masivos entre los curiosos provenientes de toda la Costa del Sol y otras provincias que querían ver el despliegue.
La situación absolutamente contradictoria es que el gobierno de PSOE y Podemos en la Junta de Andalucía no aplicó este impuestos mientras que podría ocurrir que ahora, un gobierno del Partido Popular con Ciudadanos haga lo que la izquierda no se atrevió.
En el caso de Cataluña y de Baleares, las tasas existentes al turismo se han desarrollado y aplicado por parte de la izquierda, en algunos casos con la oposición frontal de la derecha.
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