Sucedió hace 4 años, 6 meses y 23 días. Fue a principios de mayo de 2012. El cirujano doctor Guitart llevó a cabo en un hospital de Palma una operación delicada en una zona del estómago que se saldó con éxito. El paciente, persona muy vinculada al sector turístico, y sus familiares solo avisaron de la intervención quirúrgica a los familiares y amigos más allegados.
Pero la capital mallorquina y balear no deja de ser un pueblo grande y al poco se corrió la voz en los círculos del mundo de los hoteles y los viajes. Cinco días después de que abandonara la UCI y tras pasar a planta, el venturoso enfermo empezó a recibir numerosas visitas, entre ellas las de varios notables y profesionales del mundo del turismo.
El más popular de los grandes del Sector fue informado en Madrid por uno de sus más cualificados directivos momentos antes de que se iniciara el consejo de administración del grupo que preside. Nada más sacar a relucir el tema y ante el estupor de todos los presentes, uno de sus vástagos comentó sin el menor rubor que "mejor que se hubiera muerto".
Es decir, que actuó de forma aún más infame que la mantenida por Podemos ante la fallecida ex alcaldesa de Valencia Rita Barbera. Sí, más inhumana porque fue aún mucho más lejos que los podemitas que se ausentaron del Congreso cuando tuvo lugar el minuto de silencio: llegó a pedir la muerte de un ser terrenal porque este describe los excesos de su grupo.
La maldad, pues, no sólo es inherente al grupo de políticos antisistema que se sientan en el Congreso: también los hay, aunque en pequeñas cantidades, muy exiguas a Dios gracias, en el sector turístico. Allá esa persona con su conciencia por muy podrida que esté. La reacción del padre, sin embargo, fue ejemplar: le cerró la boca y meses después se dio un abrazo con el enfermo.
Del grupo, amárrense las carteras que no están a salvo.
Un luto de un minuto y en el mas allá un juicio.
El resultado de ese juicio nunca se sabrá; sería
un resultado a favor...sería un resultado contra
Irá al cielo, al infierno...acaso es que existen
Que mas da, una vez que se ha muerto; el muerto
siempre ha sido en su vida un buen vivo y es
que nadie se atreve a hablar, nadie quiere hablar
mal de un mal vivo cuando ha muerto...
Cuantos buenos vivos han muerto por culpa de unos
muertos vivos; en la política...en el turismo
Y nadie pidió para ellos ni un minuto de silencio
Infame es aquel que se enriquece a costa del perjuicio de los demás. Si además es de caracter prepotente y chulesco el calificativo se queda corto.
Al final de la partida el peón y el rey van a la misma caja y este hecho no ha de significar ni el perdón ni la absolución ni el olvido.
Muchos de los que hoy se rasgan las vestiduras en público habrán descorchado una botellita por el silencio, ahora sí, asegurado.
Sin ser podemita (calificativo que no es de mi agrado) me parece lógico que en la casa pública se haga política y no actos de postureo. Ni la familia los ha querido cerca en estos momentos en que todo apoyo es poco.
No sabía yo que un minuto de silencio fuese un acto de postureo.
Yo entiendo que el postureo , por no llamarlo de otra forma, es buscar excusas ridículas para justificar el no respetarlo.