El Gobierno de Quim Torra ha decidido exigir a Sánchez el control absoluto del aeropuerto de El Prat para elaborar un plan de promoción internacional y convertir el aeródromo, una de las grandes puertas de entrada de turistas y viajeros extranjeros, en el gran escaparate de la república catalana, según informa OK Diario.
La Generalitat se está aprovechando de la debilidad del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, para pedir, a cambio del apoyo a los Presupuestos, el control absoluto del aeropuerto de El Prat, una de las infraestructuras básicas de Cataluña. Por ello, los Comités de Defensa de la República (CDR) consideran que el aeródromo de Barcelona es un paso necesario en lo que denominan que es su supuesto “derecho de control de sus fronteras”. De hecho, el 1-O ya preveía la toma inmediata de El Prat (Los independentistas usan las playas para su propaganda).
Sánchez, por su parte, ya ha diseñado un paquete de transferencias para contentar a los independentistas de cara a sacar adelante los Presupuestos Generales del Estado, entre cuyos traspasos destacan las políticas de inmigración que tienen mucho que ver con el control de El Prat, una de las principales vías de entrada de inmigrantes en Cataluña (El nuevo presidente de Cataluña alienta pesimismo sobre la recuperación turística).
Pedro Sánchez quiere lograr como sea el respaldo de los separatistas para poder continuar en el poder. Y el orden de los nuevos traspasos de competencias a la Generalitat para contentar a los hombres de Torra, Puigdemont o Junqueras ya está definido. No obstante, transferir estas competencias no será tarea fácil ya que no caben en el actual marco constitucional. Sería necesario una reforma de la Constitución y su sometimiento a referéndum para poder ampliar la capacidad de cesión de cuotas de poder a los separatistas.
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