Leo que los ecologistas dicen que este verano bloquearán durante diez días el aeropuerto de Heathrow, para evitar que se construya su tercera pista. Es un gesto que pretende demostrar su preocupación con el crecimiento de la aviación, absolutamente desmesurado en los últimos cinco años, y a la vez sensibilizarnos a todos, aunque miles y miles de personas que no son responsables de este desaguisado pagarían las consecuencias.
El problema no es –o no es sólo– que en Heathrow se haga una tercera pista. El problema es que en cada ciudad del mundo se está haciendo un aeropuerto, o se está dando un uso intensivo a aeropuertos que antes estaba muertos, o aquellos que tenían un uso moderado ahora están saturados. El crecimiento de la aviación en Europa es importante, desde luego, pero en China, India, Latinoamérica e incluso África, es alocado, aunque naturalmente partían de una situación inferior.
Ante eso, Preferente publica unas sorprendentes declaraciones del director general de Lufthansa que dice que hay que aplicar una moratoria al crecimiento de la aviación. Uno tiene la impresión, leyendo sus palabras, que más que un tema ecológico, lo que le preocupa es que en esa expansión alocada del mercado, las compañías más pequeñas, las low-cost, están llevándose una parte de su mercado. Es una sospecha que, no obstante, no deja de significar que el espacio aéreo está saturado.
Porque, ciertas partes de Europa están, efectivamente, desbordadas, saturadas. En verano, el pasillo que va desde el norte de Italia a París y sigue hacia Londres está completamente desbordado. Los aeropuertos importantes están a reventar, las colas en los accesos son interminables, lo que nos hace evidente que esto no es sostenible.
Sin embargo, la tendencia de los fabricantes de aviones y, por ende, de las preferencias de las aerolíneas, es a usar aviones medianos y no grandes, pero en mayor cantidad. El mismo director de Lufthansa ha retirado aviones del modelo más grande, el A380, por B777, que es más pequeño. ¿No debería ocurrir que si entre dos ciudades tenemos demasiados vuelos con aviones pequeños, estos fueran reemplazados por menos vuelos, con aviones más grandes? Es lógico, pero los tiros hoy no van por aquí. Ni siquiera en los vuelos transatlánticos.
Y Airbus cerrando la línea del 380.
Esto, daría para interminables, sesudas y menos sesudas controversias.
Proporcional y prácticamente, un 318, a plena carga, consume más que un 380, también cargado, pero en fin, sabios tiene el Sanedrin.
Los pasajeros deciden,y ellos quieren más frecuencias para poder elegir.Eso no se puede hacer con aviones grandes porque no se llenan.Es lo que hay.
Decir aquí que hay que limitar la movilidad parece una provocación innecesaria. Pero también se muere de éxito, nosotros y el planeta. Habrá que ir pensando hasta dónde se puede llegar. Eso sí, con la máxima sostenibilidad.
Sí, es desmedido el aumento de aeropuertos en el mundo. No hay más que ver el caso de España: cuántos se han construido en los últimos treinta años, y el uso intensivo más allá de lo imaginable que se está haciendo de ellos. País de subnormales...
Vamos, subnormal y todo pregunto:. Cual es el ingreso de España por concepto de turismo?, cuanto de ese uso intensivo se refleja en ingresos para las comunidades?, Esa subnormalidad da a muchos que comer.