El futuro de Paradores

Despejada la incógnita de la nueva secretaria de Estado del Turismo en favor de la canaria Matilde Asian queda ahora por despejar cuál será la deriva en nombramientos -¡qué capítulo más horroroso para este hombre!- que el presidente Mariano Rajoy tendrá en relación con Paradores antes apellidados Nacionales.

Sé de buena tinta que el exministro José Manuel Soria cuando se plantó en Industria, Energía y Turismo, tuvo todas las presiones habidas y por haber para colocar a personas de distinto poder popular en esa responsabilidad. Finalmente, se impuso, como casi siempre, el criterio del jefe del Gobierno. En aquel entonces el presidente no podía decir no y tampoco quiso decirlo a Rodrigo Rato porque hasta descubrir la verdadera cara del que había sido su jefe en el gobierno Aznar temía enfrentarse a él, máxime cuando le pudo birlar la candidatura a presidente del Gobierno.

Angeles (Gela) Alarcó tenía entonces muchos padrinos y padrinas, entre ellas, la otrora todopoderosa y omnipresente Ana Botella. De hecho a su hermano le había diseñado también otro traje a su medida. La exmujer de Rato no tenía entonces -mucho me temo que ahora tampoco- experiencia alguna en gestión y mucho menos en turismo. ¡Dio igual! Eso se ventiló por razones “políticas”.

NUEVA SITUACIÓN

Cinco años después la situación es completamente diferente. Aunque bien es cierto que en la reciente toma de posesión del presidente de Galicia Nuñez Feijoó vi rondar por allí a la tal Gela y el gallego es persona de gran influencia. Y rondó también alrededor de las faldas del primer ministro que se encontraba en el evento.

A la señora Alarcó no se la puede imputar los posibles delitos del ex. Por supuesto. Siempre y cuando en algún corolario no aparezca implicada. Mencionada si lo es en autos pero ello no significa penalmente y civilmente gran cosa. Presunción y Estado de Derecho antes que nada.

Durante sus cuatro años en Paradores la empresa pública perdió dinero a espuertas y el Estado tuvo que inyectar, como mínimo y oficialmente millón y medio de euros. Ahora dice que en el 2015 ganó cuatro millones y no tengo pruebas que acrediten lo contrario.

Supongo que la tal Gela querrá seguir al frente del momio. Y no supongo, porque lo sé, que hay personas mucho más preparadas que ella para dirigir ese cotarro. Todo dependerá de la “pena” que dé a los que deciden y mandan.

PROPIEDAD Y GESTION

Una red tan formidable como Paradores, cuyos inmuebles son auténticas joyas de la Corona, debería pensar a lo grande y ofrecer beneficios mayores. Ya sabemos lo que sucede con las cosas públicas que como dijo aquella ministra el dinero público no es de nadie.

Conozco empresarios del Sector que firmarían una cesión para la gestión con muchísimo más dinero para las arcas del Estado que los magros resultados ofrecidos hasta la fecha. Entiendo que esas joyas deberán seguir en manos y en propiedad del Estado; de lo que tengo más dudas es que la gestión diaria deba continuar bajo ese patrocinio. Hay ejemplos exitosos al respecto dentro y fuera de España. Son tiempos de penuria global y particular. El Estado acumula tal deuda que debe sacar dinero de las piedras aunque ellas sean gloriosas en los siglos que conforman los extraordinarios edificios e inmuebles donde asientan sus reales Paradores.

Si se abriera una plica al mejor postor y al que más garantías de solvencia y pago ofreciese estoy completamente seguro que la puja no quedaría desierta. ¿Tiene sentido mantener la gestión de unos hoteles de lujo en manos estatales cuando sectores mucho más estratégicos están en manos privadas? Absurdo. Insisto: con todas las garantías y poniendo a buen recaudo los intereses generales de los intereses de vuelo gallináceo y particular que siempre pululan alrededor de estos asuntos.

Como tengo mis dudas que ello se lleve a cabo y mucho más en la presente legislatura si habrá que exigir al Gobierno que proceda a cooptar al mejor de los gestores y al más honrado. Para eso no necesita consenso ni perder tiempo en negociaciones con los grupos de oposición.

Es algo que va de suyo.