Quizás algún fabricante de armas, tal vez una farmacéutica, y por supuesto algunos negocios ilegales, puedan compararse. Pero los resultados que Booking ha publicado para el trimestre de verano de este año son absolutamente increíbles, incomparables, espectaculares (Booking crece un 40 por ciento en la venta de billetes de avión).
Vean: el conglomerado que conforman todas sus empresas vendió 43.400 millones de dólares en reservas. Este dinero es muy engañoso porque, aunque pasa por Booking, no es de Booking. Lo que sí es de Booking son 8 mil millones de dólares. Es decir, que en el conjunto de lo intermediado, Booking se queda con casi un 19 por ciento en comisiones.
De ese dinero, gastó un poco más del 50 por ciento en gestión y promoción, con un beneficio de 3.700 millones de dólares, ligeramente por debajo de la mitad. ¿Se dan cuenta qué barbaridad? Y si piensan en el capital de la empresa, en el inmovilizado, entonces el negocio es estratosférico.
De ese gasto total de 4.300 millones de dólares, 2.150 millones fue marketing, casi siempre en Google. El resto en innovación, tecnología y gastos operativos generales.
Los beneficios de Booking son de 41 millones de dólares diarios, cosa que supera a cualquier otro negocio turístico, por supuesto.
Desde luego, si no es el mayor negocio del mundo, desde luego sí lo es en el mundo turístico, que es a su vez un gran negocio en general. Pero nada como este. Increíble.