La verdad que uno duda sobre si celebrar o criticar a la prensa europea cuando habla de turismo en España. Criticar, porque suelen errar de forma grosera; celebrar, porque cuanta más credibilidad pierden, menos caso le hacen los consumidores.
Estamos en meses de pocas noticias, pero eso no les obliga a describir un panorama apocalíptico sobre lo que sucede en nuestro país con los turistas. Es cierto que hay manifestaciones y que hay algunos carteles desagradables, pero también es verdad que la enorme mayoría de los turistas vienen, pasan sus vacaciones, no son alterados en sus rutinas, y retornan felices y contentos.
Si yo fuera responsable de esos periódicos me lo pensaría: el impacto de sus noticias en las ventas es cero, supongo que porque nadie les cree, porque todo el mundo se los toma a guasa.
A diario se publican amenazas para los viajes. Una de las últimas augura horas en los aeropuertos porque han vuelto atrás las medidas para el transporte de líquidos en los escáneres de seguridad. Pero lo que no dice la prensa es que este retroceso no supondrá en general nada porque apenas en Italia y en Schiphol se había introducido un cambio que, encima, mejoraba la situación anterior con la que convivimos desde hace unos veinte años.
No hablemos de los anuncios apocalípticos sobre precios e inseguridad por las manifestaciones. Algo que ningún turista jamás verá, salvo alguna excepción estadísticamente irrelevante.
Dime de que presumes........ ¡si al menos se echará una ojeada!