Cae Draghi; ¿qué pasa con ITA?

El proceso de privatización de ITA, la aerolínea estatal italiana, estaba ahora mismo en la recta final. No es la primera vez que ocurre. Sí, con ITA, claro, porque la compañía nació el año pasado, pero no con Alitalia, que estuvo incontables veces a punto de ser vendida al sector privado.

Pero en la inestable Italia, siempre ocurrió lo mismo: en ese momento cae el Gobierno y a volver a empezar.

La última vez fue con el Gobierno de Renzi, cuando tras varios años de presentación de papeles, de negociaciones inacabables, estaba a punto de decidirse la venta a un consorcio en el que estaba la familia Benetton. Y cayó el gobierno, con todo el proceso a medio acabar.

Así llevamos décadas con las aerolíneas italianas: todo el tiempo intentando venderlas, añadiendo pérdidas y pérdidas durante sólo “estos pocos meses” hasta que se venda. “Estos pocos meses” terminan por ser décadas. Así vamos.

Ahora, el que queda sobre la mesa es el proceso de Draghi. Este se encontró con Alitalia operando en la ruina, con mil sanciones, llena de ilegalidades, de manera que arregló su disolución con la Unión Europea para hacer otra aerolínea sin deudas. Un truco, en realidad, porque casi todo era igual, salvo que la nueva compañía no tiene ni mantenimiento ni el handling que tenía Alitalia. Pero, eso sí, había el compromiso de venderla apenas estuviera operativa. Y esto es lo que estaba a punto de ocurrir.

Para Lufthansa, si esto queda por el camino, será otra patada, y no es la primera. Aunque la aerolínea que lleva décadas cortejando a Alitalia o ITA, sin conseguir nada, el problema es Delta, de Estados Unidos. Ha estado mil veces interesada, ha puesto señales económicas, ha llenado millones de impresos, ha hecho sociedades, ha presentado planes, pero siempre todo se ha caído con un gobierno u otro.

Ahora hay que esperar a ver qué pasa primero con el Gobierno, después con ITA, pero la experiencia dice que vendrá otro Gobierno con ideas nuevas, que querrá cambiarlo todo.

Y vuelta a empezar.