Cualquiera que haya recorrido la isla de Sicilia, especialmente si es español, y mucho más si conoce el turismo en nuestro país, se pregunta ¿por qué en Italia no tienen el turismo que tenemos nosotros? ¿Qué ocurre para que una isla de la belleza de Sicilia no tenga ningún resort? En Sicilia tienen historia, paisajes, cultura, gastronomía, tradición, las temperaturas propias del Mediterráneo, un mar azul como el mejor, aunque no demasiadas playas. ¿Qué diferencia a Sicilia de las Baleares, de Canarias, de la Costa Blanca, por poner un ejemplo?
Todos tenemos la respuesta en la mente, claro.
Esta semana, en una decisión empresarial sin precedentes, la cadena hotelera Palladium, de la familia Matutes, anunció la apertura de dos hoteles en la costa Norte de Sicilia, concretamente en Campofelice di Roccella, que está bastante cerca de un enclave costanero maravilloso como es Cefalú (Palladium abre dos resorts en Sicilia tras su peor año).
La entrada de Palladium en la zona tiene mucho de desafío. En Sicilia hay muy pocos grupos empresariales internacionales porque la idiosincrasia local es especial, porque moverse allí exige mucho dominio del terreno, porque hay un clima que podríamos calificar de ‘especial’. Si Palladium y los Matutes llegan a convertir estos dos resorts en un éxito comercial, habrán logrado lo impensable, que Sicilia, cuya presencia turística es mínima en los mercados internacionales del sol y playa, pueda empezar a competir seriamente a la caza de viajeros internacionales.
Hay que tener mucho atrevimiento para entrar en Sicilia.
Tengo curiosidad por lo que pueden hacer.
Enhorabuena por la valentía...