Tengo delante la petición de IATA, la patronal de las compañías de aviación, para que los gobiernos de todo el mundo reabran sus fronteras. Y, al mismo tiempo, tengo delante la decisión francesa de cerrar sus fronteras a todo el mundo –todo es todo, exceptuados los residentes dentro de la Unión Europea, quienes no obstante habrán de presentar un certificado negativo de Covid 19–; tengo delante el anuncio de la cadena hotelera Wyndham de reabrir su hotel Gran Algarve, de Portugal, cuando este país llega a la cifra más alta de la historia de fallecimientos por coronavirus; tengo delante la noticia de que la cadena Sheraton, ahora integrada en Marriott, ha presentado el rediseño de sus habitaciones y, al mismo tiempo, que ya no quedan viajeros en el mundo, salvo quienes puedan presentar una serie de justificaciones inaccesibles; tengo delante mil noticias negativas de Europa y Estados Unidos y veo en la portada de un periódico a Rafael Nadal jugando un torneo de exhibición en Australia, con las gradas llenas, como ocurría antes.
La dura realidad es que hay muchos en el mundo del turismo a quienes les cuesta entender que hoy estamos en lo más profundo de un pozo, del que sólo se podrá salir con la vacunación masiva de los ciudadanos. Todo lo demás, incluidos los más nobles esfuerzos de marketing, son inútiles. Provocan una sonrisa cariñosa. Ya me dirán de qué sirve una rueda de prensa, una nota informativa, un folleto presentando un producto cuando no hay vida, no hay clientes, no hay demanda.
La dura realidad nos indica que sólo algunos países del Extremo Oriente han sabido afrontar la crisis: han sido durísimos con sus fronteras y han controlado la epidemia. Por eso en Australia o incluso en China no hay riesgos.
En Europa hemos ido siempre a medio camino y al final nos hemos quedado sin economía y sin salud. Nunca habíamos estado tan mal como hoy.
Hola Buenos dias. Con diferencia la opinion mas realista y objetiva que he visto en esta web sobre el Turismo y el Covid. Absolutamente de acuerdo. Gracias por tu opinion
Estimado Fernando. No es que no comprendamos la gravedad de la situación, es que tenemos familias. Esta muy bien proteger a las personas pero también queremos trabajar para dar de comer a nuestros hijos y no perder nuestras casa, creo que no es nada malo. De que sirvió todo en marzo si tenemos cuatro veces más contagios y no cierran como antes? Por que ahora no confinan? A ver quien puede responder.. Y por qué dicen que es todo para protegernos y siguen vendiendo tabaco como esencial que mata a millones de personas al año? Pero que bien, no moriremos de COVID, moriremos de HAMBRE, o de fumar quien lo haga... pero los estancos fueron un servicio ESENCIAL... fíjate qué protección.
A ver cuando os dais cuenta que no sirve nada, ni confinar, ni mascarilla, ni distancia ni nada, es un virus casi perfecto y tenemos que contagiarnos todos, lamentablemente. Cuanto antes ocurra esto, antes pasará... Es una verdadera desgracia pero es así..
Miguel, no te falta razón en nada.
Saludos de alguien que te entiende y a la vez "no entiende nada".
¿Estás dispuesto a morir tú, o tu familia por seguir tus consignas?, yo no desde luego. Y me permito recordarte que el interés general está por encima del particular por muy legítimo que pueda ser. ¿Te parece medio razonable que este país mueran por causas evitables un 2 o 2,5% de la población total?, porque estamos hablando de más de 900 mil muertos y todos los que se producirán indirectamente por otros enfermedades desatendidas. No digas disparates, hombre.
Toda crisis es una oportunidad, y esta lo es de oro para dejar morir al turismo e introducir a España en la Europa del siglo XXI.
Tu nick lo dice todo.
La dura realidad, es que todo comenzó en China, y ahora están mejor que nadie, adueñándose de lo que les faltaba del mundo.
Mientras tanto, nos prohíben todo, y, por citar un ejemplo, siguen los partidos de fútbol, con 22 personas enfrentadas sin distanciamiento ni mascarillas durante una hora y media, claro, es al aire libre, ( pero en una playa, ni te dejan )y que me dicen del mundial de handball, dentro de cuatro paredes ( pero no se pueden reunir más de 6 personas ) todo esto me hace pensar, que se están burlando de nosotros, no podemos hacer un viaje de turismo con todas las precauciones, de 40 personas en un autobús, pero si nos dejan viajar todos los días en el metro abarrotado de gente.
Ya no se qué pensar...
Los jugadores del Melbourne Open de Tenis, por muy famosos y millonarios que sean no se han librado de estar dos semanas en cuarentena a su coste como todo hijo de vecino que pueda llegar a Australia. Ayer la ciudad occidental de Perth, más de 1,5 millones de habitantes puesta en confiniamiento total, por un caso encontrado en un hotel dedicando a cuarentena. España, 30,40 mil casos cada día, en los últimos recuentos y entre 400 y 500 muertos diarios, solo hay que darse una vuelta por Madrid, por poner un ejemplo, luego ¿nos extraña las imágenes de la pista de tenis llena de gente?
Muy buena información siempre, gracias