Según publica este mes Preferente en su edición en papel, los hoteleres piden al Gobierno que las Oficinas Españolas de Turismo en el extranjero queden integradas en las embajadas para, de esta forma, incrementar su eficacia. Los hoteleros, conocedores de que en general estos servicios no son especialmente útiles, pretenden que integrados en las estructuras de las propias embajadas sean más provechosos.
Sin embargo, probablemente se equivoquen. Una oficina de información turística es un servicio que no tiene por qué estar integrado en la estructura de la embajada, sino que simplemente tiene que funcionar con profesionalidad. Y se puede ser inútil en la embajada o fuera de ella, dependiendo de Madrid o sin depender de nadie. En realidad, el problema de estas delegaciones es comparable al de muchas estructuras del Estado: no funcionan, carecen de estímulos para ser útiles, no tienen referentes en los que podamos medir su eficacia.
Los hoteleros saben que estamos perdiendo recursos, que son escasos y que deberíamos aprovechar al máximo. Pero no sólo es un problema de estas oficinas, sino del conjunto de nuestro sector público. De hecho, hay embajadas que funcionan y hay embajadas que son una vergüenza, dedicadas todo el día a actos sociales de nula trascendencia.
El problema de las oficinas de información turística es el problema del sector público español: ¿cómo creamos indicadores de eficacia que estimulen a los responsables de los servicios a mantener unos ciertos niveles de profesionalidad?, ¿cómo los premiamos si cumplen con los objetivos y cómo los penalizamos si no lo hacen? Todo lo demás es cambiar un departamento por otro, pero sin abordar el fondo de nuestra ineficacia.
Es cierto que la eficacia no se mide por la ubicacion de la oficina sino por la agresividad comercial del responsable de turespaña en el pais, que debe ser tan positivos como para que los CONSULADOS españoles reciban avalanchas de peticiones de VISADOS El siguiente paso no depende de TURESPAÑA es responsabilidad unica del ministerio de asuntos exteriores, porque la marca ESPAÑA la dejan como un "guiñapo" algunas actuaciones de nuestros CONSULADOS.
Cuanta razón tienes querido Luis !! Habra que recomendar a algunas oficinas consulares la formula de limpiar los "GUIÑAPOS ", ante todo ,atención ,educación ,saber estar sin petulancias y siempre recordando que están al servicio del usuario representando una marca, "ESPAÑA"