Este martes, las portadas de incontables periódicos de las provincias turísticas exhiben fotografías de sus presidentes autonómicos en la World Travel Market, una de las grandes ferias del turismo. A mí me resultó llamativo que en ninguna, absolutamente en ninguna de las fotografías, aparece un inglés. Tanto los presidentes de Canarias, de Andalucía, de la Comunidad Valenciana como la de Baleares salen saludando o estrechando la mano junto con alcaldes, presidentes de otras instituciones locales, todos del país y de la región de procedencia. Ni siquiera salen otros españoles, más en esta ocasión en que la ministra no acudió (Lío político en la WTM: primera vez sin la ministra y piden cancelar la promoción).
Dicen que van a hacer promoción turística, pero tampoco en la prensa británica, ni siquiera en la especializada, sale nada de estas regiones que llame la atención. Ni tampoco algo que no llame la atención. Y, naturalmente, nunca jamás un periodista británico ha entrevistado a un líder de una región española por la sencilla razón que nuestros destinos son uno más en la cantidad ingente de stands que se disputan un milímetro de espacio en los medios ingleses.
Los comerciales de la industria hotelera van, como es lógico, porque en un mismo lugar tienen a incontables clientes, con los que no suelen cerrar acuerdos, pero sí intercambian información y, si acaso, pulsan el ambiente. Es un gran ahorro de tiempo; es, como todas las ferias, un excelente punto de encuentro.
Pase que las autonomías y hasta quizás algún ayuntamiento tengan un stand, porque es necesario estar presente y porque siempre hay algún agente local que no tiene dónde verse con sus colegas. ¿Pero los políticos? ¿Para qué han de ir?
En estas visitas, los presidentes o, en su defecto, los consejeros de Turismo, suelen contar a los medios cómo van las ventas, de lo cual no tienen ni idea simplemente porque las ventas en nuestras economías se llevan a cabo descentralizadamente, sin ningún control público, sin precios conocidos, etcétera. O sea que saben de las ventas lo mismo que los periodistas, por decir algo. Y, sin embargo, allí están sonriendo y encontrándose con los mismos con los que acaban de viajar desde Canarias, Andalucía, Valencia o Baleares. Da la impresión de que se han dejado la piel cuando no han hecho absolutamente nada más que sonreír.
Una extraña situación con la que convivimos desde siempre. Razón suficiente para mantenerla, claro.
Si quieren saber como va el año turistico en sus regiones, que pregunten a Booking, AIRBNB o RY como va el año con respecto a 2019, ellos tendrán (por desgracia) los datos mas serios de todo ésto, esta gente que sale en la foto, pura mamandurria
Con su nivel de inglés ¿Cómo los va a entrevistar un periodista local?
Pero si luego alguien dice de bajar los impuestos y racionalizar el gasto público y así no pagarles a esa panda de vividores tanto viaje de postureo, salen las voces de sus amos a decir “nooo!, que quieren acabar con la sanidad y la educación!”
Van a lo mismo que se va a la Fitur, a la Fiera de Milano a la de Rimini a la ITB de Berlin, es decir a nada
Esta situación de todo punto lamentable es un producto del “ahora” o la presencia ornamental de los políticos es una sinergia de siempre.???
A grosso modo, es cómo la vida privada disoluta del Emerito, era conocimiento de las altas esferas políticas y de los Gobiernos respectivos, amén de los mentideros periodísticos o todo el Pueblo estaba en el ajo mirando a Cuenca.???
A ver si ahora vamos a descubrir de primeras el fuego, la rueda y la estupidez humana porqué nos hemos vuelto muy exquisitos con nuestras filias, fobias y fantasmas del imaginario visceral.
Vas a comparar los desmanes de una sola persona con el despilfarro de la legión de políticos enganchados a la teta del dinero público