Los que llevamos ya años haciendo información turística (y supongo que también en otro tipo de información) lo hemos visto y leído prácticamente todo.
Yo recuerdo las ruedas de prensa de los directivos de Iberia (cuando pertenecía al INI) anunciando la creación de Binter, como gran salvación para la compañía; o el nacimiento de Viva para atacar el mercado chárter. Con el tiempo todo ha quedado en nada.
Recuerdo, por supuesto, las presentaciones de los incontables planes estratégicos de los grandes grupos turísticos, como Tui, en el que se enfatizaba que el mundo sería digital y que, por lo tanto, tenían que emigrar hacia la red. O la apuesta por China, que lo iba a transformar todo. O la conversión del mayorista en una cadena hotelera y propietaria de cruceros.
Ahora, sin embargo, veo que Tui en el Reino Unido abre 21 agencias de viajes físicas, en los centros de ciudades de la isla. O sea un retorno a lo de siempre, a lo tradicional, a lo que es histórico (Marcha atrás: Tui abre 21 agencias de viajes físicas).
Ya me gustaría que me hubieran pagado a mí una pequeña parte del dineral que se llevaron las consultoras que asesoraron al grupo alemán sobre cómo enfocar el futuro. Todo para que viniera Jet2 en Inglaterra y los superara con una fórmula sin secretos: hacer lo que se hizo siempre, vender los viajes en las agencias de toda la vida, obligándoles a dar marcha atrás.
Esto es lo malo que tiene llevar años haciendo periodismo: que lo has visto todo. Incluso lo que llega ahora.
...figurate tu..que hasta te creíste la plandemia