Ryanair se ha convertido en la primera compañía aérea europea, con una rentabilidad impresionante, que no se puede comparar con ninguna otra línea aérea. Lógicamente, jamás podría ofrecer esos números si no fuera una compañía bien gestionada. Incluso excelentemente gestionada. Esto supone tener costes bajos, para disponer de margen incluso ofreciendo precios bajos, que no siempre son tales.
No es verdad, a mi entender, que el éxito de Ryanair se base en las subvenciones públicas, como muchos de sus detractores suelen afirmar. Pero sí es verdad que la compañía juega sus bazas contra los políticos de forma magistral: los amenaza, los critica, los presiona y muy frecuentemente logra lo que busca, que son subvenciones o precios adaptados a las necesidades de las low-cost. No son cantidades que permitan ocultar la buena gestión de costes, pero sí que ayudan a la rentabilidad de la empresa.
Esta que les voy a contar, y que no ha sido casi mencionada en España, es otra de sus jugadas maestras. Y que le salió como esperaba. Italia anunció en enero de este año que subiría una tasa municipal que cobra a las aerolíneas. Como saben, Italia es el paraíso de los impuestos. Ryanair, ni corta ni perezosa, organizó un buen sarao. Y como no le hacían caso, anunció el cierre de sus bases en l'Alguer, Cerdeña, y Pescara, en el interior del país, reduciendo sensiblemente sus operaciones, y dijo que abandonaba totalmente Crotone, al sur de país. En total, suprimía 16 líneas y reducía las operaciones en otras. Algo similar a lo que ahora mismo ha anunciado en Noruega, donde dice que dejará Oslo-Rygge, un aeropuerto en el que el primer operador es la compañía irlandesa, culpando de ello a una tasa nueva que ha introducido el Gobierno.
Se pueden ustedes imaginar la que se armó sobre todo en Pescara y Cerdeña, porque Ryanair tiene mucha capacidad de movilización de gente. A veces los gobiernos aguantan y no ceden, pero este no fue el caso de Italia. Apenas seis meses después de aprobar la nueva tasa, Roma anuncia que da marcha atrás. Y Ryanair premia al Gobierno de Renzi diciendo que destinará diez nuevos aviones al país, porque sin la tasa tiene sentido operar allí. Así que ahora anuncia 44 nuevas rutas, con un incremento del 10 por ciento en el número de viajeros. Hemos de recordar que hoy Ryanair ya es la líder en Italia, muy por delante de Alitalia, Easyjet y Vueling, que tienen una presencia significativa.
Así que ahí lo ven, la presión sobre el poder político ejercida con toda crudeza y los resultados que, también es verdad, no siempre logra. ¿Es de Ryanair la culpa? Ryanair, con su poder competitivo, puede hoy darse el lujo de crecer en muchos países diferentes, por lo que opta por hacerlo allí donde los márgenes son más sustanciales. Quien no tiene ese poder, se tiene que conformar con lo que tiene delante, callar y esperar.
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