Alguien que trabaja en Preferente debe viajar, incluso con esta epidemia, al menos como gesto de solidaridad con el sector del que publica noticias e informaciones.
En uno de mis próximos viajes, alquilé un coche. El precio, como se imaginan, está por los suelos. Como es habitual, la casa de alquileres me envió por mail los datos de la reserva. Y, como también es habitual en estos días, faltando unas horas para el viaje, recibí un nuevo mail. Yo pensaba que me ofrecerían un upgrade por un precio módico, o un seguro que me libre de riesgos. Pero no. El virus impone una nueva realidad.
El mail que recibí de mi rent-a-car me ofrecía comprar el coche que alquilaba. Una especie de alquiler con opción de compra. En realidad esto último es una licencia que me tomo porque no me estaban ofreciendo exactamente el coche que alquilé sino cualquier coche de la flota. Pensándolo, es lógico: lo único que quiere hoy un rent-a-car no es alquilar los coches, sino venderlos. Quitarse de encima esos activos improductivos.
Mi rent-a-car, que tiene oficinas en absolutamente todo el mundo, me explicaba en un viaje anterior, que en Madrid, en un día normal, este mes de septiembre, alquilaba 1800 coches. Ahora, este mes, está alquilando unos 300. Por lo tanto, si quiere, puede comprar cualquiera de esos 1500 coches que están ahí acumulando polvo. O los otros miles y miles que están en los demás aeropuertos españoles o en los de otros países.
Este rent-a-car, en concreto, lo está pasando menos mal que sus rivales (a ver si me explico: en medio de la tremenda adversidad, es complicado pero uno puede encontrar diversidad de grados en el sufrimiento), porque la mayor parte de su flota mundial está en régimen de lease. O sea ya está alquilada a otros, con lo que van rescindiendo contratos en cada prórroga y que se apañe el fabricante, que probablemente sea el que hizo el lease.
Y, los demás coches, a la venta. A buen precio.
El mercado del alquiler de coches en España es bastante especifico.
No es cosa de este año sino que de cada año. Fuera de las temporadas los precios suelen estar por los suelos. Yo no tengo coche porque me sale mucho más rentable alquilar uno.
Lo extravagante sería ... que vendieran galletas María Fontaneda.
Siempre, pero siempre, han vendido coches de flota y los mejores -bajo petición- los apartan para que acumulen los mínimos km posibles ... lo contrario sería una temeridad.
Por lo que leo lo ha alquilado directamente al Rent a Car, ¿se ha parado a comparar las tarifas y lo que incluyen si lo alquila en una agencia de viajes especializada?... Igual se lleva una sorpresa.
Por otro lado, a mí ya me han ofrecido coches de rent a car para comprar hace años, así que no es nuevo. Estará agravado por la situación, pero al menos tienen algo que vender...