Año nuevo, impuestos nuevos sobre el turismo. En todo el mundo, el inicio de 2020 equivale a la puesta en marcha de nuevos impuestos sobre los visitantes. Por ejemplo, desde ahora, visitar Amsterdam será bastante más caro porque entre en vigor un nuevo impuesto adicional sobre los hoteles, apartamentos y campings (plataformas tipo Airbnb incluídas). Ahora hay que pagar unos 3 euros más de lo que ya se pagaba, de forma que en total el impuesto será del 7 por ciento sobre el precio de la pernoctación.
Venecia, también, sube los impuestos. Los que visiten la ciudad por un día habrán de pagar unos 10 euros. Hay una tasa más baja si se llega a la ciudad en horas menos intensas. Las pernoctaciones en Venecia no pagarán más porque ya pagaban un impuesto.
Japón introduce este año, año olímpico, una tasa para todos quienes deseen entrar a la isla por turismo. Es un impuesto para pagar las obras que se harán –o ya están hechas– para las olimpiadas. Es una cantidad que está en los 9 dólares por viajero. Se paga al salir del país.
También Nueva Zelanda se ha lanzado a cobrar al turista, para conseguir los recursos para mantener su naturaleza, dicen, protegida. Si usted no es australiano –ni neozelandés, por supuesto-- habrá de pagar 23.53 dólares por cada entrada al país.
A niveles menos globales hay otros impuestos que se incrementan o se introducen, pero estos son los más significativos, en una tendencia que parece que no va a parar en los próximos años. Europa, por su parte, trabaja para aumentar los impuestos sobre la aviación, lo cual repercutirá en que hacer turismo será más caro en el futuro.
Iremos poquito a estos sitios con tantos y lindos lugares que visitar
El caso de Holanda el país de los porteros huele por todos lados y vas zombi por la calle jajajaja
Es lo más normal, lo veo buena medida, y seguiré yendo a esos lugares que son maravillosos aunque pague tasas, y aquí poniendo el grito en el cielo los de siempre...
Papafrita