Hace tiempo que se ve que el encargo de venta de Alpitour tenía muy poco recorrido. Se trata del primer grupo turístico de Italia, cuyo propietario, la familia Tamburi, había decidido venderlo al salir de la pandemia (Sólo tres ofertas para la compra de Alpitour).
Sin embargo, se han producido dos situaciones al mismo tiempo: por un lado, ha habido poco interés en el mercado por comprarlo y mucho menos una puja que pudiera asegurar un buen precio y, por otro, tal vez más importante, los resultados económicos de la empresa dirigida por Gabrielle Burgio han mejorado tanto que los Tamburi definitivamente no ven sentido en deshacerse de la compañía.
El rumor de la cancelación de la operación circulaba hace tiempo, pero ahora con el informe de gestión del primer trimestre de este año se confirma que esto va para largo si es que llega un día a concretarse. Sólo en los tres primeros meses de este año, los peores del ejercicio, el grupo ganó casi 30 millones de euros, un 50 por ciento más que en el mismo periodo del año pasado.
O sea que la tendencia de la empresa (mayorista, intermediario de viajes, hotelera y transportista incluyendo la aerolínea Neos) es tan positiva que la propiedad tiene interés mínimo en vender y todo quedará en agua de borrajas.
Esto y la venta en diciembre pasado de la venta del 100% de Jumbonline Accommodations & Services a Tek Travels DMCC les da colchón para tiempos mejores en los que Alpitour cotice al multiplicador de EBIDTA con el que se sientan cómodos.