Después de años de incesante crecimiento, el sector de los cruceros se frenó en seco en marzo de 2020 como consecuencia del estallido de la pandemia (Las compañías de cruceros, a la desesperada: ofrecen viajes a ninguna parte).
En todo este tiempo, mientras que otros segmentos turísticos han logrado remontar el vuelo, las compañías de cruceros han sufrido como nadie el impacto de la crisis sanitaria. La magnitud de la crisis ha podido con empresas punteras de la talla de Pullmantur, que cesó operaciones tras meses de inactividad (Pullmantur Cruises presentará concurso de acreedores).
Pese a sus estrictos controles y medidas de seguridad para minimizar el riesgo de contagio a bordo, el miedo al Covid-19 ha llevado a los clientes a posponer sus viajes. Sin embargo, en las últimas semanas parece haberse producido un punto de inflexión.
En su intervención en el Foro Preferente, Jorge Schoenenberger, consejero delegado de Viajes El Corte Inglés, ha revelado que las reservas “se han despertado”. “Van muy bien y esta semana casi doblan a las efectuadas en la anterior”, explica (VECI busca nuevos socios tras cerrar la fusión con Logitravel).
Aunque se trata de un despegue incipiente, el directivo hace hincapié en que “la demanda viene muy fuerte” y se atreve a pronosticar una rápida recuperación de los cruceros. “En el segundo semestre de 2022 podríamos estar por encima de 2019, empatando en el global del año”, predice.
Denunciar que royal caribbean cerró pullmantur por su propio interés, dejando deudas a clientes y agencias de viajes. Una vergüenza que se permita esto a la 2 naviera más rica del mundo. El mercado español debería darles la espalda.