Francia, el siguiente caballo de batalla de Ryanair

26 millones de pasajeros de Ryanair partieron el año pasado de Italia; 25, del Reino Unido; 24 de España; casi 10 millones de Alemania, pero apenas 5 millones lo hicieron desde Francia, por detrás de Portugal o de Irlanda. Pero esto se va a acabar.

Ryanair no tiene bases en Francia, porque tenía un contencioso con el gobierno del país. Pero eso hoy es historia, porque los tribunales han regularizado la situación. Sin embargo, Ryanair aún sigue sin tener bases en ese país, lo cual está a punto de acabar. Es absolutamente excepcional que un país como Francia, donde Easyjet es la líder en vuelos de corto y medio radio, no tenga bases de Ryanair. La compañía no ha hecho ningún anuncio en firme, pero ha admitido que tendrá que abrir nuevas bases.

Algunas publicaciones especializadas consideran que, en ese caso, hay tres aeropuertos que son los primeros candidatos: Beauvais, al norte de París, es el primer candidato. Como ocurre con Hahn o Weeze en Alemania o con Charleroi en Bélgica, este aeropuerto sobrevive porque es el destino de los vuelos de Ryanair a París. Por lo tanto, tiene muchas posibilidades de que se convierta en la primera base. La segunda podría ser Marsella. Así como Niza es una base de primera importancia para Easyjet, Marsella es la base por excelencia del sur para Ryanair. Y después, mucho después, Toulouse. Pero es por decir algo, porque Ryanair tiene pocas operaciones a Toulouse. Burdeos, Nantes, Lille o Lyon tienen algún vuelo de la compañía irlandesa, pero distan de ser destinos concurridos.

Ryanair, que el año que viene estrenará nada menos que 66 nuevas rutas, en una demostración de su expansión imparable, aun tiene mercados en los que crecer: la apuesta del año que viene es claramente Ucrania, tras una fuerte implantación en Hungría, Polonia o incluso Grecia. Este año hay dos vuelos a Turquía que podrían convertirse también en un futuro punto de crecimiento, como ya lo está siendo Israel y Jordania. Pero Francia, una nación con muchos clientes, queda siempre relegada. Y Suiza, donde Easyjet sí ha puesto un pie, con una gran presencia en las zonas francófonas.