Globalia: en el aire que sigan sus dos grandes directivos

Globalia tiene en el aire la continuidad de sus dos grandes directivos como son hoy día el director general de todo el grupo desde hace pocos meses --el tercero en unos tres años--, Miguel Ángel Sánchez, antiguo responsable financiero del conglomerado de los Hidalgo, y el subdirector general de su negocio estrella, Richard Clarck, como la persona clave de Air Europa.

La venta de Air Europa por mil millones en efectivo a Iberia deja a ambos directivos con la posibilidad de marcharse a la aerolínea de IAG en cuanto las autoridades aprobasen la operación, y este extremo sería hoy el que más opciones tiene según lo que ambos vienen transmitiendo en privado, lo que dejaría a los dueños de Globalia sin los dos directivos más respetados y autorizados del grupo turístico.

Los Hidalgo han venido reconociendo su temor a que Bruselas no apruebe esta transacción, que se ve amenazada por un trasfondo político nada favorable para que unos británicos se queden con un activo tan estratégico europeo, con la oposición de los dos países más fuertes de la Unión como son Alemania y Francia por la presión de sus dos gigantes aéreos Lufthansa y Air France-KLM.

La familia Hidalgo, que también espera la fusión de sus negocios emisores con Ávoris, del Grupo Barceló, ya está atestiguando como su peso ante los políticos no es el mismo que cuando ocultaban su intención de vender Air Europa, pues hace unas semanas el presidente de República Dominicana, Danilo Medina, prohibió a Globalia desarrollar un hotel en un parque natural tras haberlo presentado unos días antes en Fitur.

También algunos periódicos están comenzando a publicar noticias que hace un tiempo no salían a la luz como las conexiones de los dueños de Air Europa con el célebre comisario Villarejo, o volviendo a ver la luz con la famosa partida de cartas con varios de los cabecillas de la 'operación Malaya' de Marbella, algunos de los cuales entraron en la cárcel.

Los Hidalgo, con la tristeza manifiesta de su patriarca por la venta de Air Europa, decidieron centrarse en su negocio hotelero de Be Live, que se nutre especialmente de los rusos en Dominicana, aunque ello no ha evitado que tantee la venta de algunos establecimientos puntuales en Mallorca, una opción que finalmente han reculado, pero en un contexto de probabilidad de perder a sus dos directivos más talentosos en pocos meses.