La universidad de Gante, en Bélgica, ha llevado a cabo un estudio sobre el entorno laboral de los pilotos de aviones que, con el título 'Anomalías laborales en la aviación', ha sido financiado por la Comisión Europea. Otro estudio más, podríamos pensar. Sin embargo, se trata de un trabajo especialmente valioso porque desvela y cuantifica la realidad del mercado en la aviación, sobre todo en el entorno de las compañías low cost.
El estudio, grosso modo, afirma que “un alarmante número de pilotos está trabajando sin relación directa con la aerolínea para la que pilotan, especialmente en el sector low cost”. Lo que detectan es que muchos autónomos en realidad no lo son, como era de pensar, sino que están contratados indirectamente por una compañía aérea, a veces incluso con más de un intermediario en medio. El estudio advierte que esta situación representa un riesgo para la seguridad aérea. El trabajo se basa en más de seis mil entrevistas y constata que un 20 por ciento de los consultados son autónomos.
Estos son los hechos indiscutibles que resultan fácil de comprobar especialmente cuando se estudian las compañías aéreas low cost. El estudio añade una serie de consideraciones en relación a por qué ocurre esto, diciendo que es con el fin de que la empresa matriz, la aerolínea, esquive de alguna manera el pago de impuestos o las cotizaciones a la Seguridad Social.
Yo discrepo con algunos razonamientos contenidos en este estudio, pero no con los datos, que son inequívocos: las aerolíneas, sobre todo las de bajo coste, incluidas las filiales de las grandes, tienen cada vez más pantallas entre ellas y los pilotos, más mecanismos para protegerse de sus presiones, para tener las manos libres. ¿Para ahorrar impuestos? Esta es una conclusión que apunta el estudio, pero de la cual no ofrece evidencias. Más bien parece que se trata de una intuición.
Sin embargo, a mí me parece valioso introducir algunos aspectos que el estudio no incluye y que, por otro lado, no podría documentar ni cuantificar debido a la dificultad para obtener las evidencias que, por supuesto, yo tampoco tengo.
En mi opinión, una parte de la situación anómala de la contratación laboral en la aviación se deriva del excesivo poder que los sindicatos han tenido -y aún tienen- en las compañías aéreas tradicionales. Todos recordamos la presión ejercida en el pasado por este sector en España y aún en estos momentos vemos cómo en alguna de las grandes aerolíneas europeas siguen ejerciendo un poder enorme para mantener unas condiciones laborales que son muy beneficiosas para sus representados, pero sobre todo que tienden a intentar controlar las decisiones de la compañía en aspectos que no tienen relación con los propios pilotos.
Si un empresario quiso aprovechar la desregulación que ofreció la legislación europea en los noventa, obviamente tenía que aprender de los problemas que sufrían las 'grandes', para lograr ventajas competitivas respecto de ellas. La primera prevención es evitar las interminables huelgas; segundo, limitar las presiones constantes e interminables de varios colectivos laborales, especialmente los pilotos; y, tercero, controlar los salarios. Si el empresario quiere, como desea todo empresario en todos los sectores, pagar sólo aquellos salarios que el mercado permite, entonces tiene que tomar precauciones en contra de la fortísima influencia sindical. Si el viajero escoge su aerolínea por precio-calidad, indiferente a su nacionalidad y a dónde paga los impuestos, comprendemos que en aviación se tiende a un mercado único en el que los privilegios históricos tienen difícil supervivencia.
Como es fácil de deducir, las compañías low cost nacieron con esa mentalidad, con ese objetivo. Basta ver qué ocurrió en los últimos veinticinco años para entender que tenían razón: si se controlan los abusos, se puede ofrecer un producto de calidad y más barato.
El resultado es que, como se pensaba cuando se liberalizó el mercado, hoy volar en Europa es mucho más barato que hace veinte años; hay una oferta más simple y flexible y, sobre todo, se ha saneado el negocio, dado que las compañías ganan dinero (Ryanair o Easyjet siempre han tenido beneficios). Por lo tanto, la libertad de mercado ha permitido superar la presión de estos colectivos y no necesariamente empeorar de forma sustancial ni sus condiciones de trabajo ni sus salarios.
Los viajeros, supongo, recuerdan los 'planes charlie' de nuestros pilotos, que eran huelgas encubiertas que arruinan a las empresas, a los pasajeros y, como se ha visto, a la larga también a los propios sindicatos, que han terminado viendo cómo quedaban al margen. Toda esta economía paralela no hubiera aparecido si la presión laboral hubiera sido más moderada, más razonable.
El estudio belga habla de un empeoramiento en la seguridad aérea a consecuencia de estas políticas. Creo que tampoco hay evidencias de esto. El estudio, por supuesto, no las aporta. Ninguno de los accidentes aéreos que han tenido lugar en los últimos años se han podido atribuir a las condiciones laborales de los pilotos (en algunos casos con condiciones óptimas) y, en todo caso, pensar que un piloto no se tiene que adaptar a los tiempos porque eso puede suponer un problema para la seguridad es como decir que el camarero del restaurante no le puede contradecir porque puede afectarle. Sí, hay que preservar la seguridad, pero supongo que las convocatorias interminables de huelgas y conflictos afectarían de igual manera la emocionalidad del colectivo y, consecuentemente a la seguridad, aunque nunca un sindicato dejó de hacer huelgas por ello.
Sí, es muy lamentable el espectáculo de un trabajador (también si es piloto) contratado por una empresa para que trabaje para otra la cual a su vez opera para una aerolínea. Pero esta vergüenza tiene causas históricas que no convendría ignorar.
Vamos a ver si le he entendido bien:
Los malvados trabajadores, a base de agruparse en diabólicas organizaciones sindicales, impedían el placer de volar a las clases proletarias de los diferentes países que conforman el mundo mundial. En esto, aparecieron heroicos empresarios, reconocidos filántropos, que idearon métodos de contratación de personal que posibitaban su anhelo de poblar el cielo con pasajeros extraídos de las clases más desfavorecidas.
En favor de la consecución de ese propósito altruista, por ejemplo, un empresario español contrata como copiloto a un chaval de veinte años, con 140 horas de vuelo totales en su curriculum, para volar de copiloto sus Boeing 717 de pasajeros basados en Venecia, y, en favor del mismo anhelo, después de cobrarle a ese piloto 26.000€ en concepto de "gastos de formación", le paga, según época del año, 30€/día que vuela, o 3€/hora de vuelo. Ambas cantidades en bruto.
Nada que ver con la seguridad de vuelo, nada que ver con la avaricia, nada que ver con la explotación laboral. Pura filantropía, puro amor al prójimo.
Es una pena, pero tenéis lo que os habéis buscado. Un poco más de inteligencia y menos sectarismo y os habría ido mejor.
Eso que tienes va a ser hernia de hiato. Por lo del regusto a bilis mal digerida que desprende tu exabrupto, digo.
En cuanto al profundo comentario con el que nos has obsequiado, la tontería no merece mayor comentario.
Vuelve Amador con sus obsesiones. La culpa de todo la tienen los trabajadores y la existencia de sindicatos... Los empresarios regalan a los trabajadores un puesto de trabajo y éstos tienen que estar agradecidos al amo. Más o menos como los esclavos de las plantaciones. Da igual el tipo de empleo, las conclusiones de Amador son las mismas: ¿cómo te llamas, nigger?... Toooby, masa. Eso es bueno. Protestar es malo. Es el maravilloso Mundo Feliz de Amador.
Que siga con sus peroratas neoliberales es cansino. Que lo haga después de lo que ha acontecido para decir poco menos que el deterioro de las condiciones laborales de los pilotos es culpa suya es poco menos que repugnante. Pero, bueno, el estudio que critica está realizado por profesionales, mientras que, aunque él se pretenda periodista no es más que un cacho de carne con ojos.
El sistema de ser contratado a través de un broker para trabajar como autónomo en una compañía aérea solo es beneficiario el empresario,además de ilegal en un vacío legal,y valga la redundancia ,ya que el autónomo debería tener su propio vehículo de transporte para poder ejercer como tal,cosa que no es real ya que nadie tiene su propio avión.
Señor Amador,hemos trabajado en muchas empresas privadas en España intentando levantarlas con mucho esfuerzo entre todos para que al final los dueños la cierren y desaparezcan.ya esta bien de sinvergüenzas y de personas sin escrúpulos amparados por la cultura política del pelotazo.Hemos tenido que salir fuera de España y de Europa para darnos cuenta de que países que siempre nos ha dicho tercermundistas nos tratan mejor y estamos mas amparados por la ley.
Sr. Amador, sus artículos me parecen más llenos de ideología que de ideas. Puede que si en algún momento se despojase de las lentes que colorean su visión, y se desprendiese de sus prejuicios, sus comentarios dejarían de rezumar resentimiento.
Para eso hizo Sepla la última huelga y ¿Quién ganó?
Y con la credibilidad perderán lectores e influencia.
Dejando de la lado las envidias sociales que generan los pilotos debido a sus elevados salarios que no dejan de ser adecuados al ejercicio de sus funciones, a su elevada responsabilidad, y al sacriificio laboral, familiar y al modo de vida que representa ser piloto hoy en dia, lo triste es que la gente y los politicos se tengan que dar cuenta a base de desgracias como la reciente. Ya hace años se han venido denunciando estos hechos, estas formas de contratacion ilegales y no se ha hecho nada al respecto. Hace años se acabo con la carrera de piloto dejando de considerarla diplomatura, se dejo de pedir el COU, se dejo de pedir el bachiller, se consiguio con ello que cualquier persona con dinero y no solo con capacidad mental pudiera obtener las licencias de piloto pues antaño no todo el mundo pasaba las pruebas de seleccion de la ENA y curiosamente en las escuelas privadas si las pasaban. Despues empezaron a cobrar por el curso del tipo del avion a volar, 30000Euros de media y fondo perdido, todo un negocio para las aerolineas. Despues vino el contratar a pilotos a traves de Broker Aereo, situados en la isla de Man, Nueva Zelanda, isla de Jersey, Irlanda, etc etc mediante contratos mercantiles entre el Broker y el piloto donde a este se le paga en bruto y en dicho paraiso fiscal. Logicamente el salario bruto de un piloto contratado por broker a percibir en este paraiso fiscal equivale al neto recibido por otro piloto contratado por una aerolinea seria que contrata a sus pilotos dentro de España, con lo cual al piloto contratado mediante broker no le cabe otra opcion que No Declarar sus impuestos ya que de hacerlo cobraria el 42 por ciento menos. Ese 42 por ciento del IRPF no declarado es lo que pagan las compañias serias en España por tener a sus pilotos contratados como marca la ley y de eso se benefician todos los españoles pues contribuye a la seguridad social. El piloto de broker tiene siempre la presion de que su contrato es anual y no sabe si le renovaran o no, no puede justificar ante ningun banco el como pagar una hipoteca, como pagar nada pues a fin de cuentas ejerce en la sombra. Todo esto acarrea muchos problemas de saludo y mentales que no contribuyen para nada a la seguridad aerea, y lo mas triste es que despues de tantos años de denuncias sindicales y denuncias particulares, tengan que ocurrir desgracias como esta para que se den cuenta de la situacion actual de los pilotos. Esto no se arregla con mas examenes en simuladores cada seis meses, ni con mas horas de vuelo, ni con mas revisiones medicas, ni con mas tests psicologicos, esto se arregla como antaño, con seriedad, con filtros de admision adecuados, con planes de estudio adecuados, con contratos laborales adecuados, con condiciones laborales adecuados, en resumidas cuentas, con las cosas bien hechas desde el principio y dando rienda suelta al egoismo empresarial que ha vendido a la gente el low cost como la reinvencion segura de la aviacion moderna economica para todos los bolsillos y es solo un espejismo ya que los que realmente salen beneficiados son ellos con sus montruosos bonus de millones de euros anuales a costa de jugar con la seguridad en la aviacion.
Un 10 al Sr. Amador.
Los sindicatos, todos, sin excepción, incluido el Sepla, solo sirven para defender a los vagos, a los retrasa-aviones (como el Sr. Gordillo) y los que más van a dar por saco a General Diéz Parlier 48, que son los abueletes, que con la excusa de ver cuanto me va a quedar en la jubilación, presionan para que todo el convenio gire en torno a ellos. Así ha sido en Iberia desde hace 20 años. Lo malo es que el Sepla ha tragado en los dos últimos Convenios traicionando a su colectivo, que le vota fervorosamente..
Con respecto a la presión de los sindicatos actualmente, es nula o prácticamente nula, incluido el Sepla, que perdió su lucha inconsciente contra Iberia en manos del Sr. Sánchez Lozano, mintiéndonos, y diciendo que Iberia la habían vendido a los ingleses. Ahora el Sepla Iberia tiene firmado un Convenio que no lo quieren para sí ni los pilotos de Vueling (¡Qué vergüenza!!) y ha dejado tirados, como vengo repitiendo en numerosas ocasiones, a todos los copilotos, que deberían dejar el Sepla para ahorrarse un dinerito todos los meses.
A los que trabajan, y no tienen tiempo que perder por el barrio de Salamanca, les dan por el behind, pero la verdad es que los sindicatos, TODOS, dan por el behind a los que trabajan, que no necesitan ninguna ayuda de ningún sindicato pues son los únicos trabajadores que quiere la empresa.
Y tiene razón el comentarista que dice que tenemos lo que nos merecemos, pues en Iberia podíamos haber volado la Express solo nosotros, y habernos ahorrado unas huelgas inútiles que no sirvieron para nada.
Y voy al tema, el que dice que trabajar para un broker es ilegal no sabe lo que dice. Y las obligaciones fiscales de los pilotos contratados por broker están muy caritas en la ley. El que no pague puede llamarle Hacienda y pedirle responsabilidades. Los contratos de broker no son anuales. Eso es mentira. La duración la fija la empresa para la que trabajas, y el modelo más común es 3 años, prorrogables. Los bancos dan hipotecas desde hace muchos años a pilotos contratados por bróker sin problemas. Otra mentira. Los filtros de admisión usados antaño en Iberia como los PEF, donde hace 23 años solo entraban hijos de comandante que venían sin tener ni idea de lo que era un avión, y otros filtros por el estilo me río yo de ellos. Todo esto con el benplácito de la Dirección de Operaciones y el sindicato, por supuesto. Y el único egoísmo desenfrenado que ha tenido la Aviación Española ha sido el Sepla.
Hagamos algo: que todo el mundo sea contratado a través de broker, desde un camarero hasta los médicos. Tiremos a la basura el Estatuto de los Trabajadores, convenios, etc, cerremos el Ministerio de Trabajo, echemos por tierra años de lucha por los derechos del trabajador y dejemos de pagar impuestos en consecuencia. Por último, pagemos en comida.
Le felicito por su bazofia de artículo.
Por suerte no todos los broker hacen contratos "basura". Yo trabajo a través de un broker dado de alta y cotizando, pero reconozco que es la excepción.
La profesión de piloto cada vez es más exigente en todos los aspectos, un error y podemos acabar en la cárcel, hay que estudiar continuamente y continuamente se están juzgando nuestras capacidades físicas y técnicas. En cambio nuestras condiciones laborales son cada vez peores. En el extranjero las exigencias son las mismas, pero al menos te pagan un salario acorde a lo que se exige. Yo cobro ahora los mismo, y no es un decir, que cobraba en el 98. Yo por que ya no tengo edad, sino me dedicaba a otra cosa que me permita disfrutar de mi familia y pasar las Navidades en casa. Y los que tanto se quejan de los pilotos, cuando no haya pilotos, que viajen a USA en barco.