Rusia burla el veto occidental: así logra repuestos de Boeing y Airbus

Es difícil determinar si los rusos son muy pillos o si Occidente es muy torpe. La cuestión es que The Moscow Times, un periódico del país, publica que las aerolíneas siguen importando piezas para sus aviones Boeing y Airbus sin problemas, o por lo menos sin problemas insalvables, pese a las sanciones aplicadas en represalia por la invasión de Ucrania (El viraje del turismo ruso por las sanciones y bloqueos de la UE).

Según el informe basado en datos de agencias, Ural Airlines, Nordwiind, S7 y Aeroflot han importado piezas por un importe del orden de los 1.200 millones de dólares, siempre a través de terceros que disimulan la identidad del comprador. Estos datos se corresponden a los últimos doce meses.

Las importaciones podrían ser superiores porque en esta cifra sólo se han tenido en cuenta las compras directas de las aerolíneas, pero es probable que haya habido operaciones por parte de sociedades interpuestas.

¿Quién vende piezas de avión a los rusos? Los vendedores son de China, Turquía, Emiratos Árabes Unidos, Moldavia, Kirguistán o Tayikistán. La mayor parte de estos países ya eran considerados sospechosos de estas operaciones. Curiosamente no aparece India, que también se había considerado cercana a Rusia en estos asuntos.

Hoy Rusia dispone de 541 aviones cuyas piezas están sometidas a embargo. Son aviones fabricados por los dos grandes occidentales o por otras empresas menores. Los aviones operativos que son de fabricación rusa apenas rondan los 150, muchos de ellos muy antiguos.

Según los analistas, apenas se produjo el embargo, durante unos meses Rusia se quedó sin repuestos. Pero a partir de los primeros seis meses, que todo siguiera operando casi normalmente significaba que se habían encontrado mecanismos y vías alternativas para resolver estos problemas.