La Asociación de Líneas Aéreas (ALA), acoge con gran satisfacción el Reglamento europeo “Refuel EU Aviation”, aprobado por el Parlamento de la UE, que establece cuotas de uso de combustible sostenible de aviación (SAF) por ser la solución más eficaz en el corto plazo para avanzar en la descarbonización del transporte aéreo.
A pesar de aplaudir la medida, la asociación advierte de que se deben superar dos barreras para su implementación con éxito. Estas son su escasa producción, en 2019 tan sólo representaba el 0,1% del carburante convencional; y su elevado precio, entre 3 y 6 veces superior al convencional.
El presidente de ALA, Javier Gándara, considera necesaria “una apuesta decidida del Gobierno por esta solución. Debe favorecer su desarrollo con ayudas a los productores. Se nos presenta una oportunidad importante de país que va más allá del sector aéreo, pero eso requiere ayudas públicas”.
En este sentido, pide seguir el modelo de Estados Unidos y Francia, que están otorgando “ayudas millonarias para favorecer la transición ecológica”. Insiste en que “no podemos perder tiempo porque corremos el riesgo de quedarnos a la cola en desarrollo de este combustible y perder la gran oportunidad que se presenta a España de convertirse en un centro de producción y exportación de SAF al resto de Europa”.
Cabe recordar que el reciente informe de PwC, titulado “Estudio sobre los impactos ligados a la transición ecológica en el sector de la aviación”, indica que se necesitarían entre 30 y 40 plantas de producción de SAF en España para descarbonizar la aviación española. Esta escalada de producción, podría generar 56 000 millones de euros de PIB y 270 000 nuevos puestos de trabajo en España.
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Como siempre
Como dice Antonio Turiel, aquí viene la segunda burbuja de las renovables... Sucede que no hay cómo enchufar tanta planta renovable que ahora produce, ahora no, ahora poco, luego nada, luego demasiado... con los problemas de estabilización de red que causa, que sólo se solucionan quemando gas... y viendo que ya sobran renovables... Pues es hora de usar esa energía para -tachán- ¡sacar CO2 del aire, volver a convertirlo en hidrocarburo y volver a quemarlo! Como si eso no requiriese 6 veces más energía que agujerear piedras y sacarles petróleo. Como si sólo sacar artificialmente el CO2 del aire no costase lo mismo que la gasolina de donde proviene. Como si sobrase agua y tierra para obtener CO2 del aire mediante procesos biológicos (fotosíntesis). Los números no salen ni saldrán salvo que se reduzca drásticamente el consumo de combustible, pero tú pon la mano, cobra de los Estados y deja que se apañen luego cuando no funcione...