La compañía JetBlue expulsó a una pasajera del avión que iba a cubrir la ruta Filadelfia-Boston al insinuar en Twitter que el piloto estaba borracho lo que provocó que éste fuera sometido a una prueba de alcoholemia que dio negativo.
Según recoge el Daily Mail, la pasajera echó mano de la red social para dar cuenta del retraso de tres horas del vuelo. "Espero el bar del avión esté completamente equipado", tuiteaba. Al leerlo el piloto salió de su cabina e informó a los pasajeros que debían abandonar el habitáculo por haberle "acusado de estar intoxicado".
A pesar de que la pasajera negó haber acusado al piloto de estar borracho ("simplemente estaba comunicando a mi familia que estaba preocupada que aún no habíamos despegado y seguía en Filadelfia"), no pudo despegar rumbo Boston ese día y hubo de esperar otro vuelo a la mañana siguiente con otra compañía.
JetBlue ha respondido a las quejas de la damnificada asegurando que "no denegamos el acceso a un cliente por expresar las críticas de su experiencia en las redes sociales, sino si la tripulación considera que dicho pasajero puede propiciar un ambiente de inseguridad”.
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