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28/9/09.- El Airbus 380 no lo tiene fácil para aterrizar. En el mejor de los casos, necesita pistas más largas que las convencionales que aseguren un tramo de frenada suficiente para detener su enorme tonelaje. La aeronave más grande de la aviación comercial impresiona por sus dimensiones a simple vista, y más aún cuando, como en este video, trata de tomar tierra desde un ángulo cuando menos atÃpico, que le obliga a efectuar un incómodo giro hacia un final seguro en cuanto las ruedas del tren tocan bruscamente la pista, y las alas baten con suavidad de la pura inercia del impacto. Ya en tierra, la polvareda que levanta el gigante y algún que otro derrape hasta que por fin recupera la recta dirección son todo un espectáculo.
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